En Cerdá llevamos años apostando por una forma diferente de hacer empresa. Una manera más humana, más cercana y más coherente con nuestros valores. Y hoy, poder decir que nos hemos recertificado como Great Place to Work es motivo de orgullo. Pero no porque lo diga un sello o una certificación, sino porque lo dicen nuestras propias personas.
1. Una filosofía, no una medallaUn reconocimiento que nace de dentro
Para nosotros, esta recertificación no es un punto de llegada, sino la confirmación de que seguimos avanzando por el camino correcto. Es la consecuencia natural de un compromiso real y constante: poner a las personas en el centro. En cada decisión, en cada proyecto y en cada reto, buscamos evolucionar con las personas, no a pesar de ellas.
Esta mirada se ha traducido en políticas concretas de conciliación, acciones de bienestar, y un entorno donde nuestros valores no están en la pared, sino en el día a día: somos personas tratando con personas.
2. Nuestra cultura: una forma de hacer empresa
Hemos hecho mucho para tener una cultura cercana, por crear un entorno donde cada persona puede ser ella misma y por seguir evolucionando un proyecto que es apasionante, pero seguimos adelante. Tenemos el foco puesto en el desarrollo más que nunca, reforzando el acompañamiento a nuestros equipos y líderes y redoblado la apuesta por una comunicación interna más clara, transparente y humana. A la vez, trabajamos cada día para profesionalizar aún más nuestra organización, sin perder de vista lo que nos hace únicos: nuestra cultura, nuestra forma de cuidarnos y crecer en equipo.
Te puede interesar:
😍
Great Place To Work 2025
Ser Great Place to Work no es una medalla. Es un reflejo. Y el hecho de habernos recertificado este año solo reafirma que lo que hacemos sigue teniendo sentido para quienes más importan: nuestras personas.
Gracias por confiar, por construir, por compartir.
Seguimos caminando. Juntos. Porque son nuestros valores. Porque es nuestro camino. Porque es la manera de hacer las cosas en Cerdá.
Ser Great Place to Work no es un logro puntual, es el reflejo diario de una cultura construida con y para las personas que hacen posible Cerdá y sus Life's Little Moments.